domingo, 26 de febrero de 2012

Las despedidas no están hechas para mí, pero tengo que vivirlas... llegó el momento.

martes, 21 de febrero de 2012

u.

Me preguntarás que hago aquí, cuáles fueron las situaciones que me llevaron a esto, a quererte en mi vida de un día para otro y no querer dejarte ir, aunque esta fuese la manera más fácil de solucionar las cosas. Pero, no se necesita solución cuando no hay problema y no hay problema por el simple hecho de que te sigo teniendo a mi lado independiente de las cosas que cause no verte lo suficiente aunque sentirte todo el tiempo, como lo hago hoy.

No creo en las palabras suaves ni en la calidad humana de lo que éstas pronuncian en la boca de los demás, pero de alguna manera hay algo de lo que no puedo dejar de aferrarme y sí, tiene que ver contigo y con esas cursilerías de las que no soy parte.

Le agregaste un par de reglas a mi vida, un par de ecuaciones justas para sobrevivir y aunque no estoy acostumbrada a esto, no quiero verme en otra situación. Y será distinto, será difícil, lo será todo quizás, pero hay una palabra que lo abrevia todo y estamos justo parados en el mismo umbral.

Y esa felicidad que me toma como suya es esa desenfrenada emoción de no saber lo que vives, de no entender lo que sucede y amar estar ahí.

lunes, 20 de febrero de 2012

Yo no te tengo, no me perteneces
pero de una u otra manera
sigues siendo mío.

domingo, 19 de febrero de 2012

2444.

En ese umbral que detecto tuyo
esa intrigante armonía que sabe a tu nombre
la cabizbaja noción incrédula por ti
desperdicia un fracción de segundo
se estrangula en medio del sur de tu cuerpo
y el norte agobiante de tu cerebro
se pierde
se desintegra
y contagia tus manos a un nuevo pesar
evaluada por tu soledad
recrea, convierte y protege
esa inmunda necesidad de controlarme.

Tu palabra contra la mía
generan una especie de movimiento
se retractan por gusto
no se necesitan
y ese amor continuo a la retórica
nos tiene incesantes en la búsqueda
en esa búsqueda por lo que somos
por esa palabra que aún no podemos ser.

Y en ese defecto tuyo de contradecir todo
me vuelvo a enervar en todo lo que amo de ti
te toco y no siento remedio alguno
y me disparas en medio de la sien
de esa sien que añorabas en sueños
en ese defecto tuyo salgo de mí misma
para concentrarme solo en ti
como lo he hecho toda la vida
como lo sigo haciendo por ti.

Frenar entre el desgaste y la emoción
te acurrucaste una vez más en mí
volvemos a soñar agotados en la misma cama de siempre
en esa malintencionada amargura de querernos tanto.

viernes, 17 de febrero de 2012

1171.

Quédate a mi lado
por un segundo
por una milésima de minuto
quédate a mi lado
sonríeme
no dudes de mí.

Quédate a mi lado
respira el aire que no respiro
bésame si es necesario
entrégame el oxígeno que no puedo consumir
hazme parte tuya
hazme parte de ti.

Quédate a mi lado
despierta mis sueños y enlázate con ellos
corre el riesgo de encontrarme
en esas ilusiones malgastadas
en los sueños ocupados con tu nombre
encuéntrame.

Quédate a mi lado
no te pierdas dentro de mí
piérdete en el fugaz desorden de nuestro amor
tenme y vuelve a susurrar
quédate a mi lado
solo por esta noche, nada más.


y ese cariño que me desborda y me hace tuya no encuentra relación conmigo misma.

jueves, 16 de febrero de 2012

Creces en mi interior
de la misma manera en que
muero en tu interior.

Agujas.

Es el principio de toda culpa. Aún recuerdo cuando reparé el momento y lo cambié por un perdón, no hubo qué hacer, las cosas sucedían por sí solas y mi precipitada emoción encontró lugar en las pequeñas huellas del ayer.

El hoy me parece absurdo, absurdo en la maravillosa armonía de no entender. Me interrogo al interior de mi misma y cuestiono las ideas, esas mismas que me llevaron a esto, a ser lo que soy, a esta gracia que me gusta tanto. El hoy avanza a tal velocidad que no lo alcanzo y vuelvo a ese ayer que degrada y me recuerda por qué, el hoy se va sin mí y aparece esa palabra que solo existe como aquella y no como situación. Me distancio de mí misma, de mis papeles olvidados, de esas frases que aún mantengo y esos dolores que llevo dentro, me distancio de esa emoción contraria de no poder seguirle, no poder mantener el paso firme. El hoy avanza a tal velocidad que en su hermoso espejismo me queda el recuerdo de haberlo visto.

Vuela el pensamiento, recorro los segundos en el reloj de mi cama, vuelvo a la habitación y recuerdo. Recuerdo que me falta tiempo, que en las calles no busco comprensión, que me he mantenido toda la vida en la felicidad plena y no en las perfectas sonrisas, recuerdo que en mí misma encontré el refugio para esconderme de esa fría sociedad que me contagia, que me derrite y me hace suya por un momento... sólo para despedirla luego.

Senté mi cuerpo en el sillón, si mal no recuerdo eran las cuatro de la tarde, el sol se refugiaba en las nubes que habitaban el día, la brisa cómoda que se aloja en la casa prendió una disposición en mí, después de unos tantos saludos de ésta misma caí en que este mundo que conservo tanto de alguna manera, me encierra por dentro y me construye en los límites transparentes de su territorio, y no lo paso, no lo evito, lo hago mío.

Grito, me nublo, disparo en la pupila de mi ojo izquierdo. Sigo siendo la misma después de tanto tiempo. El hoy ha venido a buscarme, lo sentencié con esas frases que siempre ocupo, no lo perseguí. Vivo sin estado de tiempo.
Me frustra este deforme amanecer.

miércoles, 15 de febrero de 2012

Habilité mi corazón, tres cuartas partes te pertenecen. Al cabo de unos días mi cuerpo no será tuyo, mientras mi corazón buscará una manera alternativa de encontrarte.

domingo, 12 de febrero de 2012

Quiéreme sin aviso ni propiedad.

Al costado de la cama
mirando al oeste, al sol triunfante
empiezo en ti y termino en tu sonrisa
en la fugaz discordia de tus labios
y esa singular patria que conformas
simboliza la región lunar de mis pies
juego con la brisa que creas en el viento
investigo en tu precaria humanidad
me disuelvo y entretengo tu sonrisa
esa línea perfecta
el desorden contenido
tu patria indefinida.

El sutil engaño de tus ojos
al este de mi cuerpo te encuentro desvalido
ignorante en la rutina
y tus ojos me encuentran
se pierden en la intensidad de los míos
las olas que provocan el azul de tu cielo
descolocan mi terreno baldío
me vuelven tuya sin tenerme
me hacen dar saltos a tu propiedad
y no puedo y me distraigo
y te pertenezco.

Camino en la silueta de tu cintura
estremezco mi moralidad sin perderme en ti
caduca el sentimiento uniforme de quererte
pero padezco de la enfermedad de necesitarte
y aún así te quiero
y no me pierdes por completo
sigo siendo tuya
en la humildad frágil de no serlo
y nos perdemos
por delito.

2672.

lunes, 6 de febrero de 2012

Pensar que en estos días he pensado en una sola cosa y le he encontrado un millón de soluciones a un solo problema. Sigo sin saber que opción es la correcta. No, sigo sin saber cuál es la que prefiero.

viernes, 3 de febrero de 2012

Querida Vida:

Llegué al punto en que me siento llena, en todos sus significados posibles. La felicidad y ese entorno disponible tienen un cuarto de hora para mí, para dejarme ser.

Se antepuso a mí esa armonía idílica, la frustración que conlleva no vivir desaparece por completo, redundo en lo mismo, pero aún así me mantengo despierta y me siento, puedo tocarme y no malgastarme, puedo observarme sin borrarme del todo y aún me imagino, aún pertenezco a mis sueños.

Decidí no entender las cosas, pasar desapercibida y volver a encontrarme, creo que la mejor opción es siempre seguirme, habituarme al espacio que queda, no soy feliz entendiendo las cosas, las razones no me gustan, no me divierten... Me gusta ser ilógica.

Y ese cuento de hadas que tanto detestaba, me escribe como si me conociese de hace tanto tiempo. Darle una oportunidad, dejarla sentirse mía un rato me costó años, y ahora, ahora es como si fuese parte de todos los días, algo común, pero a la vez sorpresivo en toda su extensión.

Usted que ha entendido cada palabra disléxica que digo, cada oportunidad que no he tomado por miedo, cada reproche y lágrima que se me ha ocurrido soltar, sigue siendo uno de mis mejores recuerdos, nunca me escuchó por completo porque nunca fui muy buena hablando y ahora que todo lo escribo me es fácil incluso decirle que la amo lo suficiente como para tenerla en todos lados. Querida Vida no te siento, espero que tú si puedas hacerlo.

La de siempre y para siempre...

LiteraturaNegra.