Mira a tu interior
dime que está mal.
Si quieres ver alegría
sigue mirando tu interior.
Si quieres llorar un poco
acomódate en la almohada
reclámale a Dios
está acostumbrado a los que no quieren aceptar.
Si quieres enojarte
¡Anda! Patea la silla
pégale a la mesa
pero, la rabia no se irá.
El problema no se soluciona
si es que botar energía es lo que piensas.
Dale un tiempo a tus miedos
y diles que la cobardía es el peor elemento
que se le pudo haber dado a un enjendro.
¿Quieres sonreír?
Ve tu vida
tus pensamientos, tus corazonadas
porque hasta en lo más feo
la belleza tiene escondido su premio.
sábado, 22 de agosto de 2009
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