86.-

No es que no olvide
es que el recuerdo es eterno
es que hay palabras que no
pueden encontrar vida en otro suelo.

No es que no olvide
es que el tiempo quiere que recuerde
y no hay razones para seguir intentando
si realmente no quiero empezar a olvidar.

No es que no olvide
es que el silencio habla y
otorga partidos al alma
y no es que no olvide
es que no hay un no puedo

para olvidar.

A veces el espacio nos hace acordar

para ver si realmente tenemos disponibilidad

para olvidar.

Quien me haya visto, quien me viera.-

Eras y sigues siendo lo único que al recordar me daña. No hay momento para el olvido, el olvido no entra en mi cabeza, me toma y me tira a kilómetros de todo.

Si te observo te sigue sin importar, no hubo palabras ni acciones y aprendiste a herirme, a hacerme sentir inútil e idiota... ¿Cómo lo hiciste?
Nunca esperé algo de ti, pero, cuando abres los ojos tampoco es grato lo que se ve. Siempre creí que las personas por una u otra razón entraban a tu vida, ¿Cuál fue tu razón?

Que aunque razone, piense y medite no hay razones... No hay por qué, simplemente me hiciste sentir viva, me hiciste volar y de un momento a otro me hiciste aterrizar sin previo aviso y el choque sigue siendo doloroso... Nunca te había visto partir, ahora siento que es así.

No importa si es que dice, lo importante es si siente, ¿Cómo sientes después de que te hayan quitado lo único que apreciaste por meses?

No puedo volver a tropezar por quinta vez con la misma piedra...

Ya no más.-

"Jamás no es verbo, no es sustantivo

ni adjetivo de tiempo...

Si es palabra

¿Por qué tenemos que clasificarla?

Hazla sentir en tu interior

sonríe, quédate quieta"

Sin palabras.-

Te vi a ti como la imagen eterna de mi luz. No te dejé ir en ningún momento pero, hablarte era delicado... No podía.

Es difícil cuando ves que todo lo que amas de un momento a otro se esfuma: aprender de ti no es un orgullo, es la vida misma que habla por mi y por ti al mismo tiempo, nos deja ser y ahí estamos estáticas sentadas una al lado de la otra sin mencionar una palabra... Dejamos fluir el tiempo.

Te vi, viéndome crecer... Queriéndome como nadie nunca lo ha hecho y si admirarte es poco, no hay palabra que entienda todo lo que pudiste haber significado: Porque significar no entiende menciones en letras, solo justificaciones en movimientos, en palpitaciones eternas.

933.-

¿Qué es querer?

Nunca me explicaste

cuanto tenía que hacer

para ver tus manos sobre las mías

y dejarnos llevar.

Te dije amar

y no supimos cómo reaccionar.

Si sentirse así es parte de la debilidad

no somos parte de nada

y entre tanta nada

solo quedamos los dos

unidos al otro.

No es que ame tu sonrisa

es que tu sonrisa ama la vida

y entre tanto sonreír

no nos queda más

que dejarnos ir.

¿Qué puedo decir?

El decir es poco

es nada

es tuyo

es mío

ahí quedó.

Querido cielo

no me digas querer

querer no es palabra.

¡Volemos!

Te dije una vez.

¿A dónde llegaremos?

2192.-

Le di un nunca más a mi poesia
dejé mis manos temblar
y revolqué las palabras en el por qué
nunca más la metáfora quiso aparecer.

Le di un nunca más a la esperanza
y quiso creer por mí
pude haber recuperado mi cuerpo
en cambio, preferí partir.

Le di un nunca más a la locura
pero, jamás volví a encontrar coherencia
sin darme cuenta entré a un exterior
y a un alma que no sabe entrar a mi cuerpo.

Le di un nunca más a la razón
y supo responder mejor que yo.
Así hundí mi sentir
pero, no volví a ser.

Le di un nunca más al recuerdo
no quiso seguirme y me uní
el nunca más fue un siempre;
quedé sentada en mis hombros.

Le di un nunca más a mi alma
y mi corazón no quiso latir
espiritualmente no formó parte de mí,
partió, se alejó
y entre tanto lo dejé ir.

Le di un nunca más a tú cuerpo
quien jamás me dio señales de vida
y sin malos ratos ni buenos momentos
todo lo que entiendo de él
se difundió en el tiempo.

Le di un nunca más a mi vida
y ella quiso dar otra respuesta
siguió, continuó
no quiso explicaciones...

El nunca jamás vivió
y el siempre quiso permanecer parado
volando en la mirada eterna
en la sonrisa perpleja.

4721.-

Nunca lo creí tan difícil...
Aún cuando el tiempo estaba de mi lado
no había cascadas tan profundas
ni manantiales vacíos.

¿Así es cómo empezamos de nuevo?
No hay cabida para la ilusión
ni para el recuerdo de tu adiós
simplemente déjame ser...

No hay un nunca
y el por qué voló
junto a ti...

Jamás regresó.

En un silencioso final...

Eres lo único que tengo.

1626.-

¿Cuánto tengo que extrañar para dejar de sentir?

Creo que el tiempo no importa
si es que no le das la mano.
Creo que entender se vuelve entre
tanta palabra, desagradable.

Intento mover cada parte móvil de tu cuerpo
y tu respuesta otorga silencio a mi rostro;
No hay más que hablar.

Si todo está dicho
¿Por qué sigues insistiendo?
Nunca me encontré conmigo misma
no necesito hacer lo mismo contigo.

A dónde quiera que sea
solo corre a kilómetros de mi ausencia.
No es que no pueda observarte
es que entre tanta debilidad
ya no sirve ser débil.

Es como cualquier otro día, manteniendo conversaciones "estables" diciendo palabras que no piensas pero salen... ¡Dios!

Ser un pequeño punto negro en la arena es ser absolutamente lo que nadie quiere...

¿Qué se supone que tengo que hacer?

Es nada, la nada

llega y te arrebata

la felicidad que entiendes

por absoluta, jamás por tuya.

234.-

Abrazo tu alma
y me inundo en tu mirada
en la gracia graciosa de tus ojos
en lo malicioso de tu encanto.

Absorbo tu ferocidad
el hermoso momento de felicidad
la espera común y corriente
tus labios en los míos.

Mis manos tocan tu cuello
luego quizás que.
Mis manos tocan tu dulzura sudada
y tu corazón que sigue siendo solo mío.

38.-

Luna, dime qué es lo que hay que apreciar
qué tengo que observar
para sentir mis manos heladas
y difamarme en la inmensidad.

Luna, tú que posees la luz que sueña
dime qué es el sueño en sí
para cubrirme en él
para ser feliz en él.

Luna, que interpreta el vacío como la clara felicidad
dime a que estrella tengo que ir para desear
para sentir el calor de la luz y no dejarme volar.

Luna, a donde quiera que vayas
no me lleves contigo
no recorras mi cuerpo
no lo hagas tuyo.

Luna, si hay tanto que observas
porque no hay nada que creas.
Luna, dime si el camino es correcto
pero, no ahora, no hoy… En un mañana.

Te invito a volar.-

Sonríe, incluso cuando la vida te diga que no lo hagas.

No dejes que te controlen el deseo
de enmarcar cada situación vivida.
No le permitas al sueño recrear momentos
permítele vivir unos nuevos.

No le digas adiós a todo
dile hola al adiós
y verás que entre la negatividad
siempre el optimismo va a triunfar.

Fotografía cada momento
no los dejes partir
solo mantenlos en el recuerdo
no los dejes ser parte de tu presente.

Ahórrate el consuelo
hazte el fuerte y continúa.
No hay algo más bello
que sonreirle a la amargura.

Sueña todo lo que quieras
y permítete realizar la cordura
no le dejes entendimiento a las personas
quédate con tus palabras sabias
y aprende a volar.

No amarres tus alas a la cuerda imaginaria del dolor
deja fluir la imaginación y no te arrepientas de cada
paso que cuesta, de cada lágrima derramada
es tu única prueba de haber vivido...

Es el único sabor que se irá y volverá.

Frota tus manos e inunda tus pies en el mar
contrae fuerzas y disimula reír
no te quedes en él
es solo para aprender.

3814.-

Entre palabras.-

¿Cómo caminar cuando la vida te quita tus pies?

Ocupa tus manos
la imaginación concreta
no te vuelvas más allá.

¡Quédate!
El perdón es débil
las palabras sencillas
¿Para qué arrancar?

Quizás no planeemos la verdad
pero la descubriremos juntos.
¡No te rindas!
Permanece a mi lado
y dime que problemas no hay.

Tristemente el adiós se acerca
y encuentra ventas en nuestras puertas.
Déjala entrar, salúdala y luego
márchate a su lado... Tiéntala.

1590.-

3286.-

A veces estoy

y otras recorro mi ausencia

en la ausencia de tu espera.

Entre tanto recuerdo y fantasía

no nos queda más que la inmóvil

ironía que sin cubrir nuestros cuerpos

sugiere un nuevo planteamiento al

desorden equívoco de la situación.

A veces estoy

y otras disimulo no estar

mientras la ausencia se vuelve

más obscura, todos sintonizan el

mismo canal de tu vida...

¡Sí, estoy!

Y a veces no quiero estar

y entre tanto vacío de pensamiento

seguimos uniendo lazos y luchando

contra el perdón que no se pronuncia.

Aquél que nunca se vivió

que se ahogó entre las sábanas del rencor

no está y el estar se sigue intercalando

en la monotonía continúa del sentir incómodo.