martes, 31 de mayo de 2011

Apetito.

El camino que hemos elegido es lo único que recordaremos. No dejemos que un simple vuelo se convierta en miles de caídas, caer es accidente, caer es bello. Pero no tiene sentido si todo está tirado a la suerte. No hay sentido ni lugar para aquellos que ven soñar como simples interpretaciones al dormir. Mirar la vida como la única pertenencia nuestra es el regalo más grande que podemos obtener de esto. ¿Qué es esto? ¡Volar mi vida!, ¡Sentir el aire en nuestros rostros!, ¡Acariciar de a poco nuestras sonrisas!

No me dejes contemplando sola el ayer.
Ayer está hecho para dos, para tres,
para cuatro quizás. ¿Para uno? No hay
espacio para la soledad.

No hay comentarios: